sábado, 11 de agosto de 2012

Un diminuto punto de inflexión.

Es improbable que mis entradas se transformen en algo reconociblemente positivo en su sucesión, pero sí se puede (siempre ha sido así) apreciar algo distinto en lo que a un cambio de temporada (sencillamente, otro más) se refiere en aquello que las inspira. Esto se manifiesta, aunque no radicalmente perceptible, en una ligera modificación del diseño principal, en la cabecera y en la distribución del resto de componentes (gadgets y demás elementos que pretenden aportar personalidad a este blog), llevada a cabo con la esperanzada intención de redefinir los parámetros en los que se reflejará aquello en lo que se ha convertido su autor desde que dicho blog se creó.
El blog ha sido modificado en escasas ocasiones, aunque la razón nunca ha sido tan relevante como la actual; sin embargo, el cambio realizado es uno de los más discretos que se recuerdan en toda esta conjunción de núcleos sentimentales, plasmados en textos y extraños relatos salidos de lo más íntimo y delicado de lo que no se puede decir en voz alta ni comunicar a alguien de forma directa. Es por este último motivo por el que quiero, aunque sea con una breve entrada a la que pocos prestarán la atención que se merece, dejar constancia explícita de mi conciencia sobre este cambio y sobre su inspiración, además de las consecuencias que se esperan de él. Una de las características que también cabe resaltar de esta transformación en el diseño es que precisamente el diseño es lo único que se ha modificado discretamente, y con ello surge la conclusión de que sólo se pretende, como consecuencia, un cambio en la percepción visual de la lectura de los boletines que aquí se publican. La relación que se pueda establecer entre este cambio de apariencia y otros posibles cambios de carácter más profundo en la mente de su creador será responsabilidad de los lectores, cuya incertidumbre a la hora de confirmar dicha relación será precisamente lo que saque a relucir el valor implícito que cada uno da a su particular lectura de lo que aquí es publicado.

Un saludo a todos los lectores, sean puntuales o frecuentes, de lo que no pretende ser un diario, una vía de escape, un apunte secreto, una llamada de socorro, ni un consejo escondido, sino todo al mismo tiempo.

1 comentario:

  1. Te entiendo perfectamente, yo tengo el blog desde hace casi 2 años y medio, y a veces los cambios más sutiles implican algo mucho mayor. Me gusta el nuevo diseño, y aunque no siempre comento me suelo leer todo lo que tienes por aquí, me encanta ya lo sabes! nunca dejes de escribir ;D

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